La Novena de la Aerosilla

Una historia en nueve capítulos, o en nueve partes...

O, como diría nuestro Marco Polo:

"lo que ustedes tengan ganas..."

CAPÍTULO SÉPTIMO

Sr. Presidente:

“Cuando la Política entra por la puerta, la Justicia salta por la ventana”. Según se dice, lo dijo George Washington (1.723-1.799), militar y primer presidente de los Estados Unidos.
Se dice también, que “la primera víctima de una guerra es la verdad” y la frase se atribuye  a Esquilo en la historia antigua y, un poco más cerca nuestro, a Hiram Johnson, senador por el estado de California, en 1918.
Independientemente de la autoría de las citas (y de a quienes se las atribuye), lo cierto es que se debe reconocer que hay bastante de cierto en ellas.
La Política es hoy algo cada vez más omnipresente y la Justicia resulta, en los tiempos que corren, apenas un concepto vago y abstracto, cada vez más vago y cada vez más abstracto.
En cuanto a la cita de Esquilo, o de quién sea, bien podría ser adaptada a nuestra realidad cotidiana de la siguiente manera: “La verdad es la mayor víctima de un gobierno en fuga”.
 
Porque, como es de público conocimiento, los gobiernos, cualquier gobierno, desde el más sofisticado y mejor establecido, hasta el más rudimentario, el más elemental y el más precario y endeble, como es el caso del que por ahora nos toca padecer, manipula y corrompe cotidianamente, en forma sistemática y por diversas razones a la Verdad y a la Justicia, relativizando su importancia y poniendo en duda su razón de existir.
Porque, si no se ocultara la verdad, si desde el gobierno no se mintiera a la gente de la manera en que se lo hace, no sería necesario salir a denunciar aquellas mentiras y tergiversaciones que parecen ser el único recurso que encuentran para mantenerse en el poder y llevar adelante sus retorcidos designios, en contra del sentido común y del común de la gente que les ha permitido llegar al lugar que ocupan.
Sin embargo, nos parece que es imprescindible (hoy, más que nunca) seguir pensando que tanto la Justicia, como la Verdad todavía tienen alguna vigencia y merecen ser tenidas en cuenta a la hora de elegir en qué cosas creer, aún a riesgo de aparecer ante los ojos del poder como seres ilusos o ingenuas criaturas.
Por lo antedicho, y a pesar de la estrecha relación de nuestro caso y el gobierno y la verdad y la justicia, seguimos adelante apelando a esos dos conceptos, algo devaluados, e intentando revitalizarlos para que, ojalá, vuelvan a recuperar su imperio sobre nuestra existencia y nuestro destino.
 
                       Será Justicia.
 

Ahora, aquí entre nosotros, dígame la Verdad…  ¿Será Justicia?

 

Hasta el Sexto...

 

loqueimporta.com